Estaba sentado sobre la húmeda toalla, el grupo estaba jugando a un inocente juego. El juego habría sido inocente de no haber sido porque a una persona del grupo le hizo daño, demasiado daño.
Él se mantenía sereno, fingiendo estar bien, mientras la persona de la que llevaba enamorado un año,le hacia daño haciendo cosas que le dolían con otras personas.
El juego acabo, sufría en silencio, estaba lleno de uno de los peores sentimientos que pueden atormentarte: los celos.
A la hora de la despedida un simple choque de manos, y mucho que era porque la tensión que había entre los dos chicos era palpable.
En el camino, eran tres una de ellos se peleaba con el novio por teléfono, mientras que los otros dos cantaban canciones, los tres estaban tristes, tenían sus razones,de repente por detrás el novio de la otra amiga apareció, quería hablar con ella. La segunda amiga se fue a su casa, estaba cansada de tanta pelea.Mientras los novios discutían en la acera de enfrente, el se quedó solo en unas escaleras, esperando a que su amiga dejara de pelearse con una de las personas que más quiere en este mundo, con el móvil encendido escuchando canciones de amor, de un amor no correspondido.
Los recuerdos de ese día le invadían, entraban en el con fuerza y le hacían daño, quería liberarse de ellos, llorando, gritando o como fuera. Pero no pudo se sintió indefenso y dejo que esos recuerdos le atormentaran.
Pensó en lo injusto que era con él, le insultaba, pegaba….cosas que le hacían más daño a el mismo que a la persona de la que esta locamente enamorado.
Pensó también en lo mal que lo trata el otro, es la única persona capaz de hacerle sentir mal en tres segundos, solo tiene que decir las palabras: Yo no te quiero…
Casi todos los días lo decía, casi todos los días amargado pensando en él, soñando en ellos besándose, formando una bonita pareja…
Pensó que su amor, le trataba así para que él no le amara, pero pasaba todo lo contrario, cada vez que le amargaba su amistad de hacía más débil, cada vez más peleas, mas insultos, mas tortas…
Quiso cambiar de tema porque no quería llorar, esa noche no, esa noche quería ser fuerte. De repente otro tema delicado la amistad, perder una amistad o creerla que la pierdes es una cosa dura, darlo todo, y que al final acabe pasando lo que siempre temiste e intentaste evitar…
Su amiga se despidió de su novio con un suave beso, llego llorando al lado de el, pego un puñetazo a la pared, y el la abrazo, estuvieron así un minuto, las palabras sobraban, ahora sentía impotencia, impotencia por una amiga llorando, querer ayudarla y saber que no podía, que lo que dijera en ese momento, no le haría cambiar de humor…
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