miércoles, 8 de febrero de 2012

Huir de vivir buscando aún más vida

El humo adornaba la habitación y casi no les dejaba verse unos a otros, lo cual no necesitaban, con esa cantidad de drogas en el cuerpo no necesitas ver más de lo que tu cerebro te está mostrando.
La risa llenaba la sala y los "que rule" no faltaban. Rayas, vodka, porros... en fín el típico viernes de los estudiantes de bachillerato. Nada faltaba en ese sótano, fuera del cuarto de baño, donde actualmente se encontraban haciendo una pompa, los colchones esparcidos por el suelo amortiguaban las continuas caídas de personas, botellas...
Un cartel rezaba; Sexo, drogas y alcohol. La fiesta cumplía las tres reglas, en todo momento. En una esquina de la habitación, en el pequeño pasillo, idiotas demasiado drogados para ponerse un condón follaban sin darse cuenta ni de con quien.
Y allí estaba yo, criticándolos a todos internamente mientras mi mente me recordaba versos de mi poema preferido "Que la mala vida es maravillosa" y mi mano se aferraba a una copa, ni siquiera sabía bien que llevaba, solo que estaba asqueroso y que me hacia sentirse eternamente libre. "Dicen que en la noche, la vida solo es vida"
Un chico se acercó tambaleándose hacia la tímida, la que no hablaba más que para responder al profesor y tras dos palabras, de presentacion, supongo, ya se habían unido sus lenguas. "Y el haxix diluye las aristas más áridas" me sonreí.
Una cayó a mi lado como si acabase de desmallarse, tras acercarme un momento y ver que estaba bien, en fín, que respiraba, empecé a liar maria mientras en mi cabeza resonaban frases "Saben que acaban mal y les gusta la ruta."
El reloj sonó, daban las seis de la mañana y la cabeza empezaba a dolerme, admiré el paisaje que se presentaba ante mis ojos. Globos de colores adornando, bailes contínuos e interminables, manos en entrepiernas que se veían perfectamente,"y risa y mucha risa como ménades nobles…" la puerta del baño abriéndose y haciendonos compartir el humo saturado de ideas, alrededor de diez personas saliendo, tacones que se doblaban, copas que derramaban su líquido marrón, hielos que se pasaban de labios en labios... Me sentí asqueada y quise salir de allí, busqué mis cosas y no las encontré, pero me estaba ahogando y necesitaba irme, asi que ese 3 de febrero a las seis de la mañana, en tirantillas, dejé atras ese mundo, al que sabía que volvería, adentrándome en la noche fría, si acaso esta un poco más pura que la anterior, pero no mucho. Asi, tacones en manos, helada, me sentí feliz.
. " Tengo amigos que no saben qué quieren
y se emborrachan buscando una vida mejor.
Amigos que se drogan sistemáticamente
aguardando dulzuras o un éxtasis sin límite.
¿Qué buscan los navegantes de la noche,
quienes parecen ansiar un vendaval sin tregua?
Huir de vivir buscando aún más vida."

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2 comentarios:

  1. Pensamos que somos libres al hacer todas esas cosas pero lo único que obtendremos después será algo aún más largo y duro que la propia vida en sí. Pensamos en esos momentos que somos dueños de la felicidad por el simple hecho de hacer esos actos pero se ve que no...
    PD: Me encanta cariño...(LL)

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  2. Sin embargo, sabiendo que no somos libres al hacerlo ni nada de eso, no podemos evitar morirnos de ganas por fumar, beber y pasarlo bien en ese aspecto.. te quiero

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